Los tratamientos labiales son una de las técnicas médico-estéticas más solicitadas en nuestro país. La Dra. Cristina San José, experta en Medicina Estética de IDERMA, nos explica los diferentes protocolos de remodelación labial con ácido hialurónico que existen para conseguir unos labios perfectos, sea cuál sea su forma
La remodelación labial con ácido hialurónico es, sin duda, una de las técnicas más demandadas en medicina estética. La búsqueda de unos labios carnosos, turgentes, jóvenes y bien perfilados se ha convertido en toda una tendencia en los últimos años y por ello es una de las consultas más solicitadas en nuestra clínica.
La técnica de aportar volumen, definición y armonía a los labios se ha ido perfeccionando con los años, al mismo tiempo que se ha mejorado la calidad de los productos que se inyectan. Y aunque muchos creen que cuando se habla de un tratamiento de remodelación labial solo nos referimos a conseguir unos labios más gruesos, se equivocan.
Nuestra especialista en Medicina Estética, la reconocida Dra. Cristina San José, nos explica a continuación las diferentes indicaciones que pueden realizarse en la Remodelación Labial con ácido hialurónico, así cómo por qué el ácido hialurónico es el mejor producto para ello, y cuál es el procedimiento específico para realizar esta técnica.
8 Tratamientos de Remodelación labial:
El tratamiento de remodelación labial tiene como finalidad dar al labio un aspecto natural, jovial, armónico y proporcionado siempre al rostro de cada persona. La Dra. San José nos explica los diferentes tratamientos labiales gracias al Ácido Hialurónico específico para la zona podemos realizar en nuestra Unidad de Medicina Estética:
- Hidratar la mucosa labial. Debido a la edad, las épocas del año, los cambios climatológicos… los labios se deshidratan y resecan. Con el ácido hialurónico conseguimos devolver esa jugosidad y elasticidad natural de juventud.
- Atenuar asimetrías labiales.
- Perfilar el labio. Con ello conseguimos un contorno bien definido y en muchas ocasiones volvemos a rescatar el labio natural que se va perdiendo con la edad
- Realzar en mayor o menos grado el volumen perdido del labio superior y/o del inferior.
- Mejorar arrugas peribucales que inician su recorrido en el labio y suben hacia la nariz (“código de barras”) y arrugas propias de la mucosa roja del labio.
- Mejorar las comisuras labiales, que se inclinan descendentemente (gesto de la amargura), consiguiendo levantarlas.
- Definir el Arco de Cupido y el Filtrum labial
- Corregir la sonrisa gingival. Se conoce como sonrisa gingival cuando se muestran 4mm de encía en maxilar superior al sonreír. Con el Ácido Hialurónico se consigue una sonrisa natural en una sola sesión.
¿Por qué el Ácido Hialurónico es la mejor opción para una remodelación labial?
El Ácido Hialurónico es el mejor material de relleno para tratar los labios debido a las propiedades fisiológicas y moleculares que presenta. Nuestro organismo fabrica cada día ácido hialurónico y lo degrada, por lo que es un elemento muy biocompatible con el cuerpo. El que sea un material reabsorbible (se va consumiendo con el paso del tiempo), hace que no sea un producto permanente y que su efecto sea temporal.
Actualmente en IDERMA disponemos de diferentes ácidos hialurónicos de gran calidad con distintas densidades y concentraciones con los que se consiguen tratar las diferentes zonas peribucales y labios con el fin de obtener la máxima naturalidad y seguridad para el paciente.
Técnica y procedimiento de la Remodelación Labial
Los tratamientos de remodelación labial van dirigidos tanto a mujeres como a hombres, que desean mejorar la hidratación y definición del labio. El procedimiento para tratar el labio con Ácido Hialurónico es rápido, poco doloroso y poco invasivo. Se realiza de forma ambulatoria en la consulta médica y puede realizarse con o sin anestesia local, dependiendo del tipo de ácido hialurónico que se aplique (ya que existen ácidos hialurónicos que contienen anestésico incorporado en el vial, cosa que lo hace más llevadero y reduce la molestia). En función de las necesidades y objetivos de cada caso, podemos abordar con técnica de finas cánulas, para minimizar el riesgo de hematomas, o con pequeñas agujas intradérmicas con lo que conseguiremos ser más precisos.
Una vez finalizado el tratamiento, el paciente puede continuar con su actividad cotidiana normal. Este protocolo puede hacerse en cualquier época del año y sus efectos suelen durar entre 6 meses y 1 año, dependiendo del metabolismo de cada paciente y de sus hábitos conductuales.