Las guarderías y los colegios se convierten cada año en los espacios preferidos por el Pediculus humanus capitis, los parásitos conocidos popularmente con el nombre de ‘piojos’.
Los piojos son habituales en los niños pequeños y suelen causar un picor intenso en todo el cuero cabelludo.
Al igual que los mosquitos, al succionar la sangre, los piojos inyectan también su saliva, lo que produce una especie de reacción alérgica en nuestro organismo que produce esta picazón. Por culpa de este picor, es habitual que los niños no puedan dejar de rascarse, haciéndose en ocasiones heridas en la cabeza, lo que a su vez aumenta las posibilidades de que aparezcan infecciones, sarpullidos, costras y supuraciones.
Se puede determinar la presencia de piojos mediante la inspección visual o el peinado del pelo, pero es el dermatólogo el profesional que debería confirmar la infección por piojos y prescribir el tratamiento más efectivo.
¿Cómo hacer un tratamiento efectivo?
En primer lugar, hay que huir de remedios caseros y que carecen de efectividad en el 100% de los casos (mayonesa, infusiones, aceites…).
Es importante recurrir a productos específicos para los piojos (pediculicidas) y que estén avalados científicamente y seguir, además de las prescripciones del dermatólogo, estas recomendaciones generales:
- Loción antipiojos versus champú. Aunque su tolerancia cosmética es menor, las lociones antipiojos son más eficaces que los champús, porque se fijan mejor y durante más tiempo en el tallo piloso. El cabello no debe lavarse justo antes de la aplicación de la loción, ya que la grasa del cuero cabelludo facilita la fijación del principio activo. El lavado se realizará transcurrido el tiempo de contacto indicado por el producto y puede hacerse con champú normal o bien con champú pediculicida para completar el tratamiento.
- Aclarado con vinagre. Tras el aclarado con agua, puede realizarse otro con agua y vinagre (una parte de vinagre y dos de agua). El ácido acético del vinagre ayuda a deshacer la sustancia que adhiere las liendres al cabello, lo que facilita su eliminación con una liendrera (peine de púas muy juntas).
- Acabar también con las liendres. Todos los pediculicidas suelen ser eficaces en eliminar el piojo adulto, pero su efectividad varía cuando se trata de acabar con las liendres (los huevos del piojo). En cualquier caso, el tratamiento debe repetirse siempre entre el séptimo y décimo día después para eliminar totalmente las liendres, e incluso en caso de infestaciones masivas se recomienda repetirlo diariamente durante una semana.
- Utilizar siempre la liendrera. Es muy importante peinar el pelo con un peine específico, la liendrera, diariamente para arrastrar las liendres. Es un trabajo minucioso y que hay que hacer con constancia hasta llevar varios días sin obtener huevos… de lo contrario es posible que el tratamiento no tenga éxito.
- Prevenir la reinfestación. Los peines, adornos del pelo, etc. pueden sumergirse de 5 a 10 minutos en una loción insecticida. La ropa de cama, toallas y la ropa en general deben lavarse en agua caliente, ya que tanto las liendres como los piojos adultos mueren después de 5 minutos a una temperatura superior a 50ºC. Los artículos que no puedan lavarse, se deben guardar en una bolsa de plástico, ya que los piojos mueren en 48 horas cuando se separan de su huésped y las liendres mantenidas a temperatura ambiente durante 15 días no se desarrollarán.
¿Cuándo hay que realizar el tratamiento antipiojos?
En general, los productos para piojos solo deben ser utilizados cuando la infestación haya sido diagnosticada, debiendo realizarse el tratamiento en la persona afectada y los familiares que convivan con ella.
En caso de ausencia de respuesta al tratamiento o reinfestación debe insistirse en la exploración tanto del paciente como de los miembros de la familia, por si ha quedado alguna zona o algún sujeto sin tratar.
Pero tampoco debe olvidarse que se han descrito resistencias a la mayoría de los insecticidas y que estas van en aumento en los últimos años, por lo que si se produce una nueva infección por piojos, se aconseja no repetir el tratamiento con los mismos productos, sino probar nuevas marcas.
Para evitar la posible aparición de resistencias, no es conveniente realizar tratamientos preventivos de forma indiscriminada y sin justificación clara de posible contagio.
¿Cómo prevenir la infestación por piojos?
La mejor forma de prevenir la infestación es el lavado habitual del cabello con champú normal y la limpieza frecuente de los peines y cepillos, procurando no compartirlos.
Además, en época escolar, aconsejamos pasar la liendrera de forma preventiva un día por semana, y en caso de aparecer liendres, repetir la operación a diario hasta la eliminación completa de ellas. Si aparecen piojos o el niño se rasca mucho, aplicar el producto específico lo antes posible.